Para las familias de las más de 300 victimas de aquel fatídico 25 de mayo de 1.938, seguro que aquel dia se paró el tiempo.
Y de forma simbólica, ahora van a tener un reloj con sus agukas detenidas en aquella hora de la muerte, las 10,40 horas ded la mañana.
Será uno de los objetos iconos del bombardeo del Mercado Central, expuestos en recuerdo de aquellas victimas, que personal del Ayuntamiento coloca esta semana en una vitrina en el mismo lugar arrasado por los aviones fascistas italianos, con motivo de la efemérides. Un homenaje para mujeres como la madre de Lorencito Sanz Valentí, que tal como reza su epitafio "subió al cielo a los dos años y medio". Ella hizo grabar estas palabras y su desgarradora conclusión. < En mi vida fuiste mi alegria, hoy tu tumba mitigará mi dolor>.
También un recuerdo ya siempre en el Mercado Central para otros que nunca lo han olvidado las victimas que sobrevivieron a las bombas, y sufrieron graves mutilzaciones fisicas, además del trauma psicologico. Aunque pocos, por el paso del tiempo, todavia quedan testimonios vivos de la masacre. En este rincón de piezaas anacrónicas reposa su serena trsiteza.-
Para quién este interesado, publicado hoy en el periodico 20 Minutos Alicante.-
2 comentarios:
Siempre tengo que estarte agradecido. En mi familia hubo una victima, el dueño de la mejillonera de cerca de Correos. Era de Santapola. Muchas personas de mi entorno perdieron mujer, hijos, padres, ...murio el cura que daba misa en la Rambla y mi tia abuela, su ayudante, se salvo por minutos. Mi abuelo Miguel saltó por los aires cerca de la actual comandancia de la Guardia Civil. La explosión habia matado al dueño de la Tienda de la Uva y al padre de mi amigo ya difunto El Tino. Desde niño y antes de visitar la tumba 1009, la de Miguel Hernandez, visitabamos la del niño "de la tumba azul y blanca". Allí aprendí muchas historias por parte de mis padres. Yo no olvido. Nada.
En la mejillonera almorzaba con unos amigos todos los dias y era Paco quién nos atendia. Gracias a tí por seguir este blog pués compruebo que, tengo bastantes entradas pero la historia de Alicante parece que no interesa a nadie. He comprobado que, mientras unos intentamos desenpolvar y dar a conocer nuestras señas de identidad, otros lo impiden para posteriomente colgarse medallas gracias a librejos que publican sin que nadie pueda contradecirlos ó simplemente rebocarlos. Lastima porque esta ciudad, la nuestra,aún tiene mucho que decir y lo dirá.-
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